AC/DC – Let There Be Rock

AC/DC – Let There Be Rock (1977)
Let There Be Rock es el cuarto álbum de estudio de AC/DC, lanzado el 21 de marzo de 1977. Este álbum es uno de los más importantes en la historia de la banda, marcando la consolidación del sonido característico de AC/DC, caracterizado por riffs de guitarra potentes, una base rítmica firme y la voz inconfundible de Bon Scott. Let There Be Rock se convirtió en un disco fundamental dentro del catálogo del hard rock.

Contexto de Producción
Cambio de alineación: Aunque AC/DC había tenido varios cambios de formación en sus primeros años, Let There Be Rock presenta la formación clásica con Bon Scott (voz), Angus Young (guitarra líder), Malcolm Young (guitarra rítmica), Phil Rudd (batería) y Mark Evans (bajo).

Producción: El álbum fue producido por George Young, hermano de los miembros de la banda, quien también había trabajado en sus álbumes anteriores. La grabación tuvo lugar en Albert Studios, en Sídney, Australia.

Sonido más pulido: A diferencia de sus primeros trabajos, Let There Be Rock tiene una producción más refinada, pero sin perder la crudeza que caracterizó a sus discos anteriores. La banda buscaba un sonido más directo y sólido, lo que dio como resultado un álbum con más enfoque en los riffs de guitarra y la energía en vivo.

Estilo y Sonido
Hard Rock y Blues: El álbum se caracteriza por un enfoque directo y agresivo del hard rock, con influencias del blues y el rock 'n' roll clásico de los años 50 y 60. Las composiciones son sencillas pero efectivas, con un énfasis en la potencia de la guitarra y una base rítmica sólida.
Riffs Potentes: La mayor parte del álbum está centrado en los riffs de guitarra de Angus Young, con un sonido agresivo y definido. A lo largo del disco, la guitarra de Angus es el motor principal que impulsa las canciones.
Bon Scott: Las letras de Bon Scott son irreverentes, llenas de humor oscuro y narrativas atrevidas. Su voz es inconfundible, cruda y apasionada, lo que hace que sus canciones sean aún más memorables.